Me haces sentir correr nuevamente los grandiosos ríos de mis venas, ríos que en algún momento se llegan a parar en mi vana soledad, ríos que se paran al contacto del dolor, ríos que se estremecen cuando sientes el latido del corazón saltando de felicidad. Rica lluvia, ya te anhelaba, ya me hacían falta tus suaves manos acariciar mis frágiles cabellos con los que el viento se entretiene jugando. No hacía falta invocar a las viejas deidades, por que sé que no existen en donde estoy.
Lluvia :) |
que maravilla de textoo te sigo :D un besoo
ResponderEliminar